martes, 1 de diciembre de 2009

expresion

EXPRESIONES DE RESGUARDOS INDIGENAS EN COLOMBIA










Religión y Ceremonias
Era politeísta. Sus divinidades representaban diversas fuerzas de la naturaleza. Sus principales dioses fueron Chiminichagua, principio creador o fuerza suprema, Xué, el sol, Chía, la luna, Bachue, la madre de la humanidad y diosa de las legumbres, Cuchaviva el arco iris, Chibchacun, dios general, Chaquen, dios de los corredores y Bochica, héroe civilizador. Las lagunas eran consideradas lugares sagrados; allí celebraban ceremonias religiosas de gran esplendor, durante las cuales arrojaban al agua, tunjos elaborados en tumbaga,
Los sacrificios humanos eran ceremonias populares de gran importancia en los pueblos chibchas. Fuera de esta ceremonia en que el homenaje al dios entrañaba el sacrificio de un ser humano, existían otras de gran renombre como la famosa de El Dorado, de carácter mágico-religioso. Esta ceremonia tenía ocurrencia con motivo de la posesión en el mando del cacique de Guatavita y era por lo tanto de celebración poco frecuente. En cambio las grandes procesiones rituales se sucedían a menudo. Tenían lugar en ciertas épocas del año y adquirían una grandiosa fastuosidad.




ASENTAMIENTOS INDIGENAS


Según el censo realizado por el DANE en 1985, la población indígena en Colombia asciende a cerca de 237.759 habitantes que representarían el 0.85% de la población total. Sin embargo un trabajo censal específico sobre comunidades indígenas realizado por el PNUD-DNP en 1988(Arango R.; Sanchez E.), arroja un total de 448.710 indígenas que representarían un 2.6% de la población colombiana. Se pudo determinar que la población indígena esta repartida en 81 grupos diferentes que se localizan generalmente en zonas limítrofes y en áreas de manejo especial como las del Pacífico y el Amazonas. La mayor parte de la población indígena se ubica en los departamentos del Vaupés, Amazonas, Guajira, Cauca y Putumayo.Si miramos hacia atrás y basados en algunas fuentes históricas de la época de la conquista, como los extensos censos que sobre estas comunidades se hicieron con fines tributarios, se ha podido establecer que cerca de 3.000.000 indígenas habitaban el territorio colombiano a la llegada de los españoles. Este dato realmente podría subestimar el valor real si tenemos en cuenta las numerosas tribus que se localizaban en territorios inaccesibles para la época.Estos mismos censos registraron un dramático descenso en la población indígena en asientos principales como Tunja, Pamplona, Pasto, Popayán, Velez y Cartago, con una reducción a la sexta parte de estas comunidades en casi un siglo. Este desastre tuvo como causa principal la llegada de los europeos al nuevo mundo y su deseo por ocupar el espacio que las comunidades tenían reservado para su desarrollo social y cultural. De esos censos tributarios el último dato obtenido fue en la segunda mitad del siglo XVIII que registró 136.753 indígenas en el territorio.Solo hasta 1938 aparecen nuevamente cifras demográficas sobre estas comunidades. De acuerdo a estos nuevos registros, la población indígena ha ido en aumento pasando de cerca de 100 mil en 1938 a mas de 400 mil en 1988. Sin embargo esta recuperación demográfica no es igualmente cultural pues se han perdido gran parte de las comunidades mas pequeñas y por ende muchas lenguas nativas y un sin número de tradiciones desapareció.De los 81 grupos indígenas encontrados en Colombia, los mas numerosos son los Páez con unos 94.670 individuos, los Wayú con unos 80.267 individuos, los Embera con 41.718 individuos, los Guahíbo con unos 19.299 individuos y los Yanacona con unos 17.880 individuos.La característica mas sobresaliente de las diferentes comunidades que están asentadas en Colombia es la relación que han establecido con el medio ambiente en el que viven, logrando que sus sistemas culturales, de producción, organización social y política funcionen con base a un manejo sustentable del medio que los rodea. Los grupos o comunidades indígenas que habitan en la actualidad el territorio colombiano se pueden diferenciar y agruparse entre si por el diverso número de lenguas que utilizan (Tabla 2), por su forma de adaptación al medio que los rodea y finalmente por las formas de asentamiento y de organización sociopolítica que los rige. En Colombia se pueden encontrar grupos nómadas de cazadores y recolectores como los Makú y los Cuiva que son organizaciones pequeñas que se desplazan generalmente en el llano y la selva. La movilización de estos grupos cada día es mas difícil debido al establecimiento de grandes fincas ganaderas, minas y también la continua violencia que azota la región. Esto conllevó al deterioro y en algunos casos la perdida irremediable del amplio conocimiento de estos grupos sobre la etología animal, la biología, dinámica y aprovechamiento de la base natural de los bosques. También encontramos comunidades con un patrón de asentamiento seminómada y ribereño. Estos han basado su subsistencia en la horticultura, la pesca, la caza y la recolección. Se establecieron principalmente en las zonas de los llanos, la Amazonía y las selvas del pacífico. También se encuentran sociedades o comunidades con un patrón de asentamiento sedentario, ubicadas principalmente en la Zona Andina. Estas comunidades se especializaron en la utilización y aprovechamiento de diversos pisos altitudinales que les dieron mayores posibilidades de producción y diversificación en sus cultivos. Generalmente se organizan en cabildos o sociedades altamente jerarquizadas y a este tipo de sociedades pertenecen comunidades como los Tunebos, los Kogis, los Pastos y los Guambianos entre otros. Otro grupo de comunidades presentan la particularidad de habitar zonas de extrema sequía como la Península de la Guajira y todas sus actividades y patrones de desarrollo se basan en la capacidad de búsqueda, recolección y almacenamiento de agua. Aunque estos grupos utilizan generalmente para su subsistencia la agricultura y la ganadería, estas actividades dependen en gran parte de los escasos periodos de lluvias y del aprovechamiento de los ríos que drenan la zona. El futuro de las comunidades indígenas en Colombia no es el mas alentador. Gran parte de ellas sufren el exterminio físico y cultural que conllevara a la perdida de la información biológica y de tipo social que hace parte de su desarrollo histórico. Los procesos de expansión y producción capitalista, el establecimiento de megaproyectos mineros y eléctricos, la apertura de vías, las obras de infraestructura, el avance de los frentes de colonización, la violencia y el narcotráfico que han trascendido las fronteras de los territorios comúnmente indígenas ha incidido en la degradación y transformación de las formas culturales tradicionales. Sin embargo, en Colombia a partir de la constitución de 1991, se reforzaron e impulsaron nuevas y novedosas políticas relacionadas con las comunidades indígenas y su medio ambiente. Para tal fin se creó un nuevo tipo de división territorial en el país en células llamadas Entidades Territoriales Indígenas (ETI). Estas nuevas entidades tienen una mayor autonomía y sus autoridades, nuevas responsabilidades fiscales y legales. Igualmente las comunidades también se hacen responsables por los recursos naturales de sus territorios. La siguientes tablas presentan información relacionada con las diferentes comunidades indígenas que habitan el país, las familias y macrofamilias lingüísticas a que pertenecen, su ubicación geográfica y la población estimada hasta 1988. Esta información fue tomada y adaptada del libro El Medio Ambiente en Colombia, publicado por el IDEAM en 1990. Los datos y la información que se utiliza en el texto fue obtenida de Perfil Ambiental de Colombia (Colciencias, 1990), Introducción a la Colombia Amerindia (Instituto Colombiano de Antropología, 1987) y de El Medio Ambiente en Colombia ( IDEAM, 1998).